Su apellido evoca la Psiquiatría que con tanto prestigio ejerció su padre. Juan José, pero ella está convencida de que nació para ser oncóloga pediátrica.
Casada y madre afirma que, de esta profesión tan dura, le gusta “todo”, aunque parezca imposible.
Admira y valora la coherencia y la fidelidad, no le queda tiempo para ella y no soporta la mentira.
Es Blanca López-lbor dentro y fuera del hospital. Le hubiera gustado conocer a Teresa de Calcuta y al Papa Juan Pablo ll, es más de sushi que de cordero y, desde luego, lo que es ahora se ajusta perfectamente a lo que soñaba de niña.